ENTONCES ¿A QUIÉN MATAMOS?

“Las uvas de la ira” es una de esas novelas gordas de más de 500 páginas que todos tenemos en los estantes de nuestra librería y que nunca hemos leído. Fue escrita por John Steinbeck en 1939 y por ella recibió el Pulitzer en 1940. Retrata crudamente la situación de la clase trabajadora americana inmersa en la miseria tras el crack financiero de 1929 (¿os suena de algo?) en su lucha contra la violencia y la injusticia de los poderosos. Todo esto ocurría tan apenas hace 80 años y parece que ya nos hemos olvidado de esa historia… esta es una de las conversaciones “reveladoras” que contiene la novela:

Este es un país libre.

Bueno, intente comprar la libertad. Por aquí decimos que un tipo tiene tanta libertad como su dinero le permite comprar. 

                  

John Ford llevó la novela al cine en 1940 y esta es una de su escenas cruciales, la escena de un desahucio del que nadie se hace responsable, pero donde unas víctimas sin derechos son aplastadas por la ceguera inhumana de la imparable maquinaria del poder económico y político (luego se quejan de las revoluciones):