BURKINA

La semana pasada prometí mantenerles informados de lo que pasara en Burkina Faso tras el golpe de Estado perpetrado por el Coronel Mamadou Bamba y sus secuaces del Regimiento de seguridad presidencial (R.S.P.):

Pues he de informarles de que a pesar de haber habido diez muertos y decenas de heridos la sangre no ha llegado al río gracias a la inmediata intervención de los democráticos países vecinos de la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (Cedeao). El presidente interino Michel Kafando fue repuesto en la poltrona ayer mismo, justo una semana después del golpe frustrado. Para futuras intentonas recomiendo a Mamadou que aproveche su estancia en la cárcel para leer el libro Técnicas de Golpe de Estado de Curzio Malaparte que seguramente le servirá de inspiración y le permitirá pulir su defectuosa técnica.

El también repuesto primer ministro, Isaac Zida, declaró que, aunque sus miembros serán amnistiados, la unidad militar golpista será reformada y convenientemente purgada (desde RM le recomendamos el aceite de ricino, mano de santo oiga Sr. Isaac) y que las elecciones previstas inicialmente para el 11 de octubre serán aplazadas "varias semanas, por razones técnicas" (sic). 

Estas elecciones presidenciales y legislativas cerrarán la etapa de transición abierta tras la caída del expresidente Blaise Compaoré al que los golpistas pretendían retornar al poder, derrocado por un levantamiento popular en octubre de 2014, de ahí que el gobierno repuesto fuera interino. 

El alma mater del golpe, el General Diendéré, Presidente del Consejo Nacional para la Democracia de la junta militar golpista, reconoció el "gran error de haber dado este golpe", pero recordó que con Blaise Compaoré de presidente el Regimiento de seguridad presidencial a su mando vivía mucho mejor, así que manifestó su voluntad de presentarse a las próximas elecciones. Por lo que tanto si las gana como si no me temo que los burkineses estarán jodidos con tanto golpista...