¿De dónde eres?
Nací en Cuba, pero hace diecinueve años que vivo aquí, mi papá era sevillano, soy hispanocubana (vaya, vaya pensé yo, me voy a largar pronto de aquí). Nací en Pinar del Río.
Yo he estado por allí, estuve en el parque nacional de Viñales.
¡Ah! Y ¿cuántas cubanas te follastes?
Mogollón, y todas más delgadas que tú. (En estos ambientes la bordería es fundamental, si no te comen).
Entonces te dejo, hay más chicas en el local (las mujeres siempre buscan que te sientas culpable, ni caso).
No te vayas, puedes quedarte hasta que termine el zumito –le digo mientras le magreo las lorzas. Por lo menos está dura como una piedra –pienso para mis adentros.
¡Ay! ¡me vas a poner cachonda! (el truco del almendruco), ¿Vienes mucho por aquí? (típica pregunta de puta para saber cuanto te puede timar).
No, es la primera vez (esta respuesta es un error clásico, hay que contestar siempre que sí, para que sepan que no te chupas el dedo), ¿y tú? –le preguntó con sonrisa cabrona.
Pues aunque no te lo creas –me dice la lumi, no vengo mucho, sólo cuando necesito dinero, porque yo he trabajado en el hospital de limpiadora, pero lo dejé porque tengo los riñones fatal.
Ah!! Claro, limpiar pollas es mejor que limpiar quirófanos, y aquí además no te duelen los riñones, pensé yo mientras se los palpaba.
¿Y ahora estás buscando otro trabajo menos cansado?
No, estoy cobrando el paro –me dice.
(¡Hija de puta! ¡Estafando a los españoles! Esto es lo que me faltaba por oír en un club, una puta cobrando el paro, se me salían los ojos de las órbitas).
Para disimular mi indignación le dije algo así como que enseguida la llamarían del paro para ofrecerle trabajo.
Me envían cartas casi todos los días –me contestó, pero yo paso porque sólo me mandan mierda, cosas de limpieza y de cuidar viejos.
Claro, claro... (Debe querer trabajar de ingeniera).
La conversación siguió por otro tipo de derroteros y calentamientos, pero creo que a mis lectores les interesan otro tipo de cuestiones que procedo a resumir a continuación.
Andaba yo alargando la conversación por si salía otra tipa más follable, pero parece ser que aquél día (y me temo que siempre, amiguitos: no vayáis al Sarita) había lo que había y no me iba a ir del club sin conocer lo más interesante de los antros del placer: las habitaciones. Mi deber es informar, y si para ello hay que tirarse a una mujer con sobrepeso, uno se sacrifica (uno no es Dios y de vez en cuando le sucede alguna de estas). El caso es que la chica me calentó ligeramente con su sensual voz, duras tetas y fresca fragancia.
Hecho un mar de dudas propuse pasar a la acción. Sígueme morito –me dice.
Mecagüen tu puta madre –pienso yo, te voy a deshacer zorra cabrona.
La sigo por un pasillo de no más de un metro de ancho (pasó sin rozar, que conste) que hay entre el puto baño en el que me quedé encerrado y el principio (o final) de la barra. Sorteando el teléfono (tamaño cabina) que hay en la pared se llega al final del pasillo (no habrá más de tres metros), donde hay dos puertas, abre la de la izquierda y me invita a pasar.
2 comentarios
Torpedo -
Aaaaaayyyyyyy Rutero, la verdad es que no acabo de saber que te molesta mas: que cobre subvencion (deporte nacional en spain), o que te llame morito (recuerda los beneficios que eso te ha reportado en otras ocasiones, pecador).
De todos modos, no puedo quitar una imagen de mi cabeza....el Rutero devorando tan suculenta presa cual anaconda engullendo un elefante...decidido...paciente...sacrificado...triunfante...hasta el fondo!!
Seguro que lo hiciste por castigarla, se lo merecia, pero controla tu ira. recuerda que su castigo es tu placer...condenada por...el Rutero Castigador!!
Si no fuera por estas sufridas trabajadoras, habria que hacer caso a aquellos que piensan que mas vale polla en mano que cientos de coños volando!!!
Armando -
Más triste es que haya españolas que limpian casas de moras (yo conozco dos casos), y por otro lado entiendo que prefiera hacer de cuidadora de viejos válidos un ratito que de cuidadora de viejos inútiles horas y horas, y que prefiera limpiarles el sable que el culo.