PARA CONOCER A ALGUIEN DEBES LUCHAR CONTRA ELLA
Aunque haya pasado mucho tiempo, hoy recuerdo aquella noche como si hubiera sucedido hace una hora. Cuando nos acostamos me dijo, estoy cansada, no quiero follar. Pero yo, cuando estoy en la cama con una mujer no puedo evitar el contacto, por eso la empecé a acariciar... ella insistió en que no quería (pues bien empezamos pensé, mañana la mando a tomar por culo) y yo le dije, pues vale, me di la vuelta, hasta mañana y apagué la luz. Al instante ella me estaba acariciando y pidiéndome hablar. Yo le expliqué que la deseaba mucho y que por eso quería hacerle el amor. Ahí quedó la cosa, apagué la luz y nos dispusimos a dormir como siempre, abrazados. No pude evitar comenzar a acariciarla y a sobarle los pezones, todo muy despacio (pasó mucho tiempo). La daba besitos, la acariciaba las manos, el cabello... y ella poco a poco se iba convulsionando y yo, aguantándome (dispuesto a aceptar su decisión, por supuesto, yo soy un caballero), notando su excitación. Yo seguía a lo mío (impasible), con mis caricias y demás, hasta que ella tomó mi mano y me la fue llevando hacia su sexo (yo no quería, pero soy de naturaleza dócil), poco a poco mis dedos fueron entrando en acción calentando el témpano hasta que se abrió del todo y pude meterle los dedos en un charco de placer. Entonces ella se empezó a refrotar contra mi verga y yo me puse encima aceptando el juego (si no quieres follar no seré yo quien te fuerze) hasta que ella no pudo más y cogiendo la polla con su mano se la introdujo para que le hiciera el amor. Fue fantástico, siempre lo recordaré, siempre la recordaré. Es una lástima que la relación acabara. No me quedó otra salida que decirle adiós, cada persona debe recorrer su camino (aunque sea doloroso) y los nuestros se separaron tanto que no nos dejó elección, espero que tengas un buen recuerdo de mí. De plegarme a sus deseos hubiera acabado siendo un pelele ridículo en sus manos y yo acabaría odiándome a mí mismo y a ella, yo debo buscar otro camino porque quiero protagonizar mi vida. Has apostado fuerte y te has equivocado. Las jugadas a veces no salen bien y es difícil hacerle un caño a un buen defensa como yo. Lo siento bonita, no coló.
26 comentarios
Gecé -
Gecé -
Gecé -
Manolo -
Obviamente esta cita está dedicado a Armando.
Armando -
¿Cuándo piensas quien ha cedido más? (y es malsana por tu parte)
o cuándo piensas
¿Ha cedido alguna vez? (y entonces eres un pelelillo sin remedio y sin cojones para dejar las cosas claras y decir adiós.)(Pero no dudes que acabarán dejándote las cosas claras y diciéndote adiós)
Manolo -
Gecé -
Manolo -
Manolo -
Gecé -
Manolo -
Pero más razón tiene Gecé cuando afirma que en la pareja hay obligaciones recíprocas por ambas partes: serás un pelele si dejas que te usen o te desprecien.
Gecé -
Armando -
Pero lo obvio no es siempre lo correcto.
Nunca olvidéis que sois hombres, y que a las mujeres les gusta que su hombre sea un hombre con mayúsculas, y que si cedéis a sus exigencias os despreciaran primero y os abandonarán después.
Si realmente os importa la pareja con la que estáis, jamás cedáis en lo esencial, y en lo accesorio jamás cedáis sin contrapartidas.
Si no lo hacéis así, creedme, os quedaréis sin familia, sin casa y las putas, de las que tendréis necesidad, ya que habréis pasado mucho tiempo sin sexo, las tendrán que escotar vuestros amigos solteros.
Es posible que perdáis la pareja si no cedéis, pero perderéis seguro toda la familia si cedéis en lo esencial.
Armando -
Yo no puedo ni quiero juzgar tus intenciones.
Pero al decir eso lo que realmente están diciendo es que si te comprometes con una mujer ya no puedes sino ceder.
Dicen que el compromiso con tu pareja y el ser hombre están reñidos.
Dicen que el amor es sinónimo de acabar siendo un pelele.
Y es normal que lo digan:
Cuándo las leyes eran marcadamente machistas las mujeres tragaban con ruedas de molino, y ahora que las leyes de divorcio, o mejor, la interpretación que de éstas han dado nuestros jueces, son totalmente contrarias al hombre, ya que si tienes hijos (esos que según no se que gilipollas no son tuyos sino de la vida, pero los pagas tu) acabas pagando el piso dónde folla tu mujer con tu sustituto y la manutención de tus hijos para prácticamente no poder ni verlos, es claro, intelectualmente hablando, que tienes que ceder tu.
Gecé -
La última frase de Kaizen no la entiendo, y mira que yo soy un hombre de grises.
Kaizen -
Pepito Grillo -
Kaizen -
Gecé -
En cuanto a la visión de la pareja como una lucha en la que vencer, no estoy de acuerdo. Hay muchas variables que entran en juego, no hay que ceder en las cosas esenciales, sí se puede ceder en lo accesorio. Cada uno sabrá qué es lo esencial y qué es lo accesorio para él. Tal vez sea una guerra con una infinita sucesión de batallas, treguas, ofensivas, victorias, derrotas, armisticios... y a lo mejor al final se sabe quién venció. Y las victorias también pueden ser pírricas.
PePito grillo -
Manolo -
Manolo -
Él mismo reconoce ser un buen defensa, pero si no se arriesga y sólo se defiende es difícil ganar el partido de la vida.
Gecé -
Gecé -
Manolo -
El administrador nos ha obsequiado con un relato erótico muy bueno; pero también nos muestra su miedo al compromiso. Su camino es otro. Pero que no olvide que todos los caminos tienen su precio...
Gecé -