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EL DESEO Y LA PAREJA (Dr. HAAGANS, Redes 08/07/07)

Hay tres razones básicas para desear tener pareja: deseo de seguridad, deseo de afecto y deseo estético. Cuando una persona encuentra cumplida satisfacción a sus tres deseos básicos en su pareja y su pareja encuentra satisfacción a los suyos en aquella nos encontramos ante la pareja perfecta. Cuando estas premisas (todas o alguna) no se cumplen de manera adecuada, pueden entrar en juego terceros actores, también llamados “complementos de la pareja”.
Las dos primeras razones son claramente economicistas y cortoplacistas y determinan en muchas ocasiones el nacimiento y el fracaso de la pareja en breve plazo de tiempo (y su mantenimiento eterno también). El deseo de seguridad es básicamente económico y social (aquí suelen cometerse muchos errores, puesto que muchas veces el coche, la casa o el trabajo u otros aspectos no son lo que parecen, hay que informarse bien antes de tomar ciertas decisiones que te pueden determinar la vida). El deseo estético tiene un componente básicamente sexual (aquí pincha mucha gente) y de exhibición de la pareja (es importante para las personas poder exhibir en público a su pareja, eso les da también sensación de seguridad), y dura toda la vida, a pesar de lo que nos han querido hacer ver siempre eso si importa... y mucho.
El deseo de afecto es una razón a largo plazo, es lo que hace que la pareja dure en el tiempo, muchas veces el afecto puede hacer que defectos (nunca ausencias) en las otras dos razones puedan ser pasadas por alto.
Sin embargo, es muy difícil mantener en el tiempo las tres razones someramente expuestas en los puntos anteriores. Es aquí donde entra la inteligencia humana a administrar con precisión las dosis adecuadas de los complementos necesarios y es aquí donde se corre el riesgo de romper la pareja. Estos complementos espero sean objeto de amplio comentario y debate.
Extracto del programa Redes tomado a vuela pluma por Rutero (disculpen las imprecisiones, espero haber recogido la esencia de la teoría económico-sicológica de la pareja del Dr. Haagans).

La canción de Don Antonio Machín "Corazón Loco" ilustra a la perfección el problema de los complementos que sólo mentes preclaras son capaces de ver (tenía que ser cubano, claro). No he podido encontrar la versión auténtica de Machín por lo que adjunto vídeo de la versión de Chucho Valdés y El Cigala y transcribo la letra.

No te puedo comprender ,Corazón loco ,No te puedo comprender ,Y ellas tampoco, Yo no me puedo explicar como las puedes amar tan tranquilamente, yo no puedo comprender como se pueden querer dos mujeres a la vez y no estar loco. Merezco una explicación ¿Por que es imposible seguir con las dos? Aqui va mi explicación: A mi me llaman sin razon Corazón loco

Una es el amor sagrado Compañera de mi vida Esposa y madre a la vez

La otra es el amor prohibido Complemento de mis ansias y al que nunca olvidaré (Machín dice No Renunciaré, creo que actualmente impera lo políticamente correcto) Y ahora ya puedes saber cómo se pueden querer dos mujeres a la vez y no estar loco

 

15 comentarios

Gecé -

Procrear puede hacerlo todo el mundo, parece mentira que en este mundo superregulado se necesiten permisos y licencias para cualquier tontería pero para una actividad bastante seria como es procrear no se exige nada. ¿Y por qué será que es más fácil dejar embarazada a una novia que a una esposa?

Armando -

Yo no he dicho que sea de imbéciles procrear. Procrear pueden hacerlo los genios y los lerdos.
He dicho que la única forma de perpetuarse los imbéciles es procreando.

Armando -

El hombre solo, acaba en manos de la zorra o de la gallina, y así se convierte en hombre casado.
Este refrán, de tiempos del Caudillo, ha sufrido en la actualidad unas variaciones democráticas.
Así ha surgido una nueva especie, híbrido de la zorra y la gallina, el zarrio gallináceo ibérico, que reúne todos los defectos de la zorra y de la gallina y ninguna de sus virtudes, que ha acabado extinguiendo a sus predecesoras.
Hoy el refrán se reformula así:
El hombre solo, acaba en manos del zarrio gallináceo ibérico, y así sufre como hombre casado o emparejado, de hecho o sin hacer.

Gecé -

¿O por el hecho de tener mujer e hijos tiene uno una familia, un hogar?

Gecé -

En tiempos de González, cuando Miguel Durán presidía la ONCE y ésta participaba en Telecinco (la época de las mamachicho: las malas lenguas decían que eran elegidas palpando habida cuenta de las limitaciones visuales del accionariado), Onda Cero ("Onda Ciego"), etc. etc... se decía que: "En el país de los tuertos el ciego (Miguel Durán) era el rey".
No, no creo amigo Kaizen que estos hombres solos (puteros, siluros) acaben en manos de una zorra o de una gallina mayormente porque no buscan "acabar" sino "continuar", ir saltando de unas a otras, no han hecho nada irreversible (dentro de lo más o menos reversible que pueda ser la vida, tema que también daría para un comentario más largo).
En cuanto a lo del procrear pienso que la familia ya existe con la mera pareja, a la que se pueden añadir los hijos. Pero éstos no son necesarios para formar una familia. La familia la formas tú y tu mujer. ¿O acaso un matrimonio sin hijos deja de ser por ello una familia?

Armando -

No hay más ciego que el que no quiere ver.

kaizen -

Y ya que he utilizado el refranero, seguiré. Ya dice la sabiduría popular que "mejor solo que mal acompañado", pero también sentencia que "el hombre solo, acaba en brazos de la zorra o de la gallina", que en este blog se diría que el hombre solo acaba PUTERO o SILURO.
Un abrazo a todos.

kaizen -

Poco más aportar. Evidentemente la vida en pareja conlleva muchas dificultades...pero si se consigue un equilibrio en la pareja (que se convierte en familia cuando llegan hijos) creo que vale la pena. Aunque cada uno hace de su capa (y de su vida) un sayo.

kaizen -

Además quiero recordar que sobre estos temas ya disertamos ampliamente en este blog, dentro del tema "Diario ciclotímico", bajo el título "Para conocer a alguien debes luchar contra ella".
Allí ya salieron interesantes motivos para la discusión

kaizen -

Aunque no he podido comprobar el programa de Redes donde sale este Dr. Haagans, estoy básicamente de acuerdo con el resumen expuesto.
Por otro lado, decir que me parecen muy acertados también los comentarios de Gecé, con sus diferentes "mezclas".
Y también está el "procrear primario" que dice Armando. Lo que no entiendo es por qué es cosa de imbéciles...a ver si me lo explica.

Armando -

Hay un cuarto deseo, que para mi es el más primario de los cuatro, aunque quizá hoy en día se esté atenuando en nuestro primer mundo y es el deseo de procrear.
Los imbéciles que no podemos perpetuar nuestro recuerdo por medio de una genial creación recurrimos al método de perpetuar nuestros genes.

Gecé -

La canción expresa muy claramente la posibilidad de que nadie nos satisfaga de forma completa en estos tres ingredientes a los que me refiero y haya que buscar en varias personas la plenitud. Con todos los problemas y riesgos que esto conlleva.

Gecé -

O siete partes de cuerpo, tres de corazón y unas gotas de cabeza, por seguir con otro cóctel explosivo.

Gecé -

Precisando un poco más, diré que los ingredientes pueden ir a partes iguales o no. Y que pueden salir mezclas muy dispares, disparatadas incluso, en las que no desaparece ninguno de los ingredientes: nueve partes de cabeza, una parte de corazón y unas gotas de cuerpo, por ejemplo.

Gecé -

Por una vez una teoría propia: lo deseable es amar a la vez con la cabeza, el corazón y el cuerpo. Si alguno de los tres ingredientes falla, mal vamos. Un amigo maduro, digo mayor, sostiene que al final lo del cuerpo lo vas sustituyendo por la conversación.