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rutamudejar

L@S NIÑ@S NO MIENTEN

Hace poco tuve el honor de asistir a la boda de un viejo amigo. Estaba invitado también el amigo Goyo con su mujer y su hija de cuatro años, Elena. La ceremonia se preveía completa, nada más entrar en la Basílica el Coro entonaba no sé que canción nupcial. Cuando llevábamos unos cinco minutos y el coro atacaba con el ave maría de Shubert la niña gritó a pleno pulmón ¡¡¡ME ABURRO !!!, llevaba razón, vaya a burrimiento (con lectura de Gibran, Khalil sobre el matrimonio incluida (búsquenla en google los interesados), vaya tostón). Poco después interrumpió no se que bodrio de lectura inquiriedo el porqué todo el mundo iba a ir a cenar y ella se tenía que ir a la cama (pura lógica, esto no es una democracia). Pero lo mejor estaba por venir y ocurrió mientras el cura agitaba en su mano la bendición papal la niña emitió una opinión que tetembló en toda la Basílica desde el atrio hasta el coro: ¡¡¡CUÁNDO SE ACABA ESTOOO!!!!. Y es que l@s niñ@s no mienten.

4 comentarios

Rutero -

No se volverá a repetir Sr. Manolo

manolo -

Cierto. Esas sesiones de diapositivas con amaneceres eternos, cañones que tardan siglos en disparar y monumentos aburridos...
No era una boda, ¡pero Sr. Rutero, que largo y tedioso lo hizo! ¡con lo fácil que era poner otros "monumentos"!

Gecé -

Y es que te invitan a tomar café y hale, a ver el vídeo (en el que lo que te muestran no es interesante y lo interesante no te lo muestran; seguro que los comentarios de la niña de cuatro años no salen en él). Y el matrimonio se nota que se sabe de memoria el guión, reparten sus papeles, tienen las gracietas ya preparadas y las repiten mecánicamente... en fin, creo que mi cupo de bodas ya está cubierto, no tengo ninguna a la vista (es curioso, como las letras de cambio: "a la vista", será porque hay pagos de por medio) aunque esto me hace pensar que me hago mayor y que la fase de las bodas quedó atrás. Con todo, qué distinto es ir a una boda porque te apetece, porque significa algo para ellos y también para ti, a ir a una boda por compromiso en la que ni los propios novios saben muy bien por qué se casan (o sea, se anulan según una de las pintorescas acepciones del DRAE).

Gecé -

Querido moderador, dale tiempo a la hija de tu amigo Goyo, igual es tu media naranja... aún peor es que te endosen un reportaje de fotos (o el vídeo) sobre el mismo tema.