LA PINTAN CALVA

A la Diosa Ocasión los clásicos la pintaban con media cabeza rapada y media cabeza con melena, montada en la rueda Fortuna.... significaba que las ocasiones ruedan y cuando vienen hay que agarrarlas de frente del pelo, porque una vez que pasa viene la parte calva donde ya no se puede agarrar.... 

Pues ahora al Estado se le ha venido una buena Ocasión con la bajada de los precios del petróleo que ha incidido en una bajada del precio de los combustibles.

El Oligopolio de la distribución ha visto la Ocasión y la ha aprovechado para no trasladar la totalidad de la bajada de los precios del petróleo a los combustibles que venden en las gasolineras, incrementando así su margen comercial.

Sin embargo el Estado no ha visto la Ocasión y ha mantenido invariable el tipo impositivo del impuesto sobre hidrocarburos. Si bien es cierto que, suponiendo que el número de litros vendidos siga siendo el mismo (es de suponer, al tratarse de una bajada de precios), no ha disminuido su recaudación, debido a que la base imponible del impuesto está constituida por el volumen de producto expresado en miles de litros a la temperatura de 15º C, y el tipo aplicable es un tanto alzado, por ejemplo en el caso de las gasolinas sin plomo, 400,69 euros por cada 1.000 litros.

Por lo tanto, si el Estado quisiera aumentar la recaudación y desincentivar el consumo de una energía cara, escasa y contaminante, debería aprovechar la Ocasión y subir los tipos impositivos, para evitar que la Distribución capture esas rentas de los consumidores, volviendo a los márgenes comerciales anteriores.