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rutamudejar

Lord Raglan, El tabú del incesto, Pay ot 1935, pág 29

Parece estar suficientemente demostrado que los niños pequeños y los animalitos maman todo lo que se encuentra al alcance de su boca, por lo que es preciso enseñarles a mamar donde se debe.

3 comentarios

Celedonio Carrasca -

La verdad esta en la boca de los niños.
Los adultos no deberíamos olvidar lo aprendido en nuestra niñez.
Tenemos que encontrarle el gusto al arte mamatorio.

Armando -

¿Deberían ser estas clases sexistas? Es decir, ¿deberíamos dar distintas enseñanzas mamatorias a los niños que a las niñas?
¿Habría que cambiar la constitución para adecuarla a estas realidades?

ACRATADOR -

De vez en cuando uno necesita hablar de amor fraterno y de otras perversiones.